En las tardes de invierno, y al calor del fuego en la chimenea, la familia se apretujaba junto al abuelo, que siempre tenía algún chascarrillo, anécdota o cuento para sus nietos, que entusiasmados la esperaban, así que el abuelo les contó el de la piedra en el camino, que abuelo había vivido personalmente.
Y comenzaba rememorando la conversación entre la mujer y marido de seguir teniendo al abuelo en la casa, la mujer le repite otra vez a su marido, que el abuelo está muy viejo y que hay que llevarlo al asilo, el hijo lo asume finalmente y le dice al abuelo que le ayude para subírselo a la espalda que tienen que hacer un viaje los dos, un viaje a coscaletas cuyo destino es el asilo.
Hecho esto, el hijo inició el camino andando hacia el asilo, como el camino era largo y ya cansado se paró y bajando al abuelo de su espalda se sentaron sobre una gran piedra en la orilla del camino; estando allí sentados el abuelo de dijo a su hijo, hijo aquí me senté también yo cuando lleve a tu abuelo al asilo, y me contó que también tu abuelo se había sentado aquí cuando llevaba a tu bisabuelo.
El hijo lo escuchaba y reflexionaba sobre lo que le estaba contando su padre “el abuelo” y cuando este concluyó de contar su historia y la de su padre y la de su abuelo, de que todos habían parado en la misma piedra para descansar, el hijo supo que el seria el siguiente y decidió acabar con la tradición.
Y dar por finalizado el de llevar al abuelo al asilo, así que le dijo a su padre, volvemos a la casa, y se subiéndose al abuelo otra vez a coscaletas, le dijo, padre hoy y aquí se acaban los viajes al asilo, y con el abuelo a coscaletas volvieron a su casa, por ello el dibujo que presentamos es del abuelo llevando al nieto a coscaletas hasta la piedra e indicándole, donde acababa una maldita tradición y donde había comenzado una nueva realidad para la familia
No solo se rompía con aquella maldita tradición, sino que se iniciaba un nuevo tiempo, un nuevo compromiso y nueva una realidad que reforzaba la unión de la familia, como la semilla que hace germinar una nueva planta que dará nuevos frutos,
Dibujo Jesús de Covadonga Martinez