En todas las elecciones, tanto regionales como nacionales, hemos conocido de la voluntad de nuestros políticos de acabar con el permanente olvido de la Región, y a ello se han comprometido. Conseguirlo es vital para poner poder en valor todas las potencialidades con las que cuenta la Región, y para hacerlo realidad es preciso recuperar el dialogo y la negociación, y consensuar la Región que queremos, para que gobierne quien gobierne el proyecto de región y su realización continúe.
Es un hecho que, la situación actual es consecuencia de la inexistencia de ese gran ACUERDO consensuado por la Región, tanto en la Educación, en la que la Región se sitúa en los últimos puestos a nivel nacional, tanto en el abandono escolar, como en el nivel de formación de los Adultos, como y singularmente por el continuo retraso en la incorporación de la Región a los grandes ejes de comunicaciones, mientras que si lo hacían los territorios de su entorno, y a su insuficiente financiación, entre otros.
La realidad hoy es que la Región sigue en los mismos ratios que en el año 2007, entre 15 y 18 puntos por debajo de la media nacional tanto en Renta como en PIB por habitante, y en la misma aportación al total del PIB nacional, mientras que su estructura productiva, se aleja cada vez más de la media nacional en producciones de alto valor añadido; en el sector de los Servicios a la venta, la Región según la Contabilidad Regional de España de 2022, ya está 6,20 puntos por debajo de la media nacional.
Cambiar esta situación precisa y con urgencia de un PACTO POR LA REGION (por encima de las diferencias ideológicas, poniendo la Región y su futuro como el principal compromiso), con objetivos, plazos y medios para situar a la Región en la media nacional, impulsado por el Gobierno regional, y consensuado con Partidos Políticos, Sindicatos y Empresarios.
Consensuando un programa de actuaciones para la transformación socioeconómica de la región, a la vez que conseguir nacional la programación de las infraestructuras conforme al Acuerdo del 6 de marzo de 2020, conscientes de que el desarrollo social y económico de la Región será mayor o menor en función de su incorporación a los grandes ejes de comunicaciones, viarias, aeroportuarias, portuarias y ferroviarias
Un Compromiso que conlleve a derribar los muros que condicionan su desarrollo, y que recoja por una parte, la negociación con el Gobierno nacional para que la Región se incorpore definitivamente a los grandes ejes de comunicaciones, comenzando por la declaración de interés nacional del nuevo puerto de el Gorguel y su remisión a Bruselas, un puerto vital para la Región de Murcia y fundamental para España como referente logístico en la fachada mediterránea, junto a Valencia y Algeciras, y puerta de entrada a la UE por el sur.
Desdoblamiento y electrificación del corredor ferroviario con Albacete en ancho europeo para pasajeros a 250 km/hora y con un tercer hilo para las mercancías, como se recoge en el PITVI anexos I y II.
Conclusión del corredor ferroviario en alta velocidad con Cartagena, así como su continuidad por el Corredor mediterráneo hacia Lorca y su desdoblamiento hacia Almería y Granada.
Continuidad del corredor ferroviario del mediterráneo para las mercancías, que sigue parado en Monforte, en paralelo a la A-7, bifurcándose a la altura de Santomera hacia Cartagena, el puerto de Escombreras, el nuevo puerto de el Gorguel y la ZAL de los Camachos. Así como continuando en paralelo al arco norte de la A-7 y conectar con el corredor con Albacete, lo que evitará que las mercancías, en cualquier dirección, pasen por la estación soterrada del Carmen.
Es un hecho que el Aeropuerto regional precisa de una mayor activación y ello solo será posible traspasando la propiedad a AENA, si es preciso por un euro, para siendo de su propiedad lo integre plenamente en su red, lo que conllevará ventajas para todos (ver este diario La Verdad, 15 septiembre, artículo de David Gómez “El pozo sin fondo del aeropuerto de Corvera”
Y por otra parte, acordando un PLAN DE ACTUACIONES que partiendo de la reducción del gasto tanto en la Administración regional y privatizar la televisión regional, reduciendo la burocracia a la vez que implementando el silencio administrativo, se conforme como destino de inversores, a la vez que atrayendo talento y emprendedores, singularmente en la Industria y en los Servicios avanzados, conformando a la Región como destino inversor en el mediterráneo.
El impulso al sector turístico precisa de la construcción de nuevos hoteles, impulsando ventajas para su implantación y o modernización, tanto en volúmenes como en su priorización y reducción de los impuestos para su realización.
La Región cuenta con el mar Menor y la Manga, un lugar singular y único y el Camino de la Vera Cruz a la Ciudad Santa de Caravaca, que se deben conformar como referente principal, junto al teatro romano de Cartagena, entre otras muchas singularidades con que cuenta la Región, y todo ello llevando a cabo un programa de externalización de estas realidades, en coordinación con los grandes operadores del sector en las principales capitales europeas.
La adecuación territorial de la Región a la nueva realidad es una necesidad, desde la creación del municipio de la Manga y su entorno, a la recuperación de Cartagena como provincia, así como la implementación de un plan para apoyar el desarrollo e implantación de nuevos proyectos e inversiones en los municipios de menos de diez mil habitantes, conseguirlo es, además de un reto, una necesidad que pueden y deben hacer realidad nuestros representantes en la Región singularmente a nivel nacional,
publicado el 25 de septiembre en el diario la Verdad